CONTROLA TU DIÁSTASIS
Debido al aumento del volumen abdominal durante los 9 meses de gestación, los músculos abdominales más profundos (transverso del abdomen, erectores vertebrales, diafragma y suelo pélvico) dejan de funcionar en sincronía y de realizar sus funciones de manera óptima, es por esto por el que el trabajo de prevención y el fortalecimiento de la faja abdominal y el suelo pélvico es necesario desde el primer momento del embarazo.
Aún así en muchos casos ocurre lo que solemos llamar: desprogramación de la faja abdominal. El transverso abdominal deja de funcionar y no gestiona bien las presiones abdominales apareciendo la posibilidad de sufrir una diástasis abdominal.
La diástasis abdominal ocurre cuando el tejido conectivo que envuelve a los músculos rectos del abdomen pierde su rigidez, por lo tanto, nuestro abdomen no tiene sujeción ni estabilidad por su parte anterior, llegando incluso a detectarse el volumen y movimiento de las vísceras abdominales.
Teniendo en cuenta estas alteraciones, el tratamiento preventivo durante el embarazo , así como el entrenamiento para la recuperación posparto es una necesidad y no se debe retomar el ejercicio físico normalizado sin haber pasado por una readaptación al movimiento de la función corporal.
¡Y nosotros sabemos como ayudarte!